Que alguien que no conocemos nos envíe una solicitud de amistad en redes sociales o nos empiece a seguir no es algo que al principio pueda parecer peligroso, pero nunca debemos confiar a ciegas en que la persona que está al otro lado sea quien dice ser.
Ser víctima de grooming es más fácil de lo que parece, por ello te invitamos a que tengas precaución y prestes atención a las señales.
Grooming, un delito de agresión sexual
El ‘grooming’ es una práctica delictiva de acoso y abuso sexual cometida por un adulto que, ganándose la confianza de menores de edad, trata de involucrar a este público objetivo en una actividad sexual.
La digitalización y las redes sociales, permiten usar estos canales para establecer un primer contacto. Pero es importante dejar claro que esto es un delito de agresión sexual y que puedes denunciarlo.
¿Cómo lo hacen?
Se trata de una práctica en la que el acosador establece contigo mediante las nuevas tecnologías y, tras ganarse tu confianza fingiendo ser otra persona, comienza a hablar de temas relacionados con el sexo, te solicita fotografías o vídeos íntimos, o incluso llega a presionarte para mantener relaciones sexuales.
Quien lleva a cabo esta práctica suele intentar que te sientas solo o sola, te aísla o aleja de tu círculo de confianza (familia, amistades, profesorado…) para que sientas dependencia.
Este clima de confianza hace que acabes compartiendo tus secretos, material íntimo o, incluso, que llegues a pensar que tu agresor es tu único apoyo, pero todo es una ilusión creada con el propósito de abusar de ti y es importante que lo identifiques. Para lograrlo, suelen falsear su identidad, haciéndote creer que es un chico o una chica de tu misma edad, usando imágenes de otras personas para sus perfiles y adoptando el mismo lenguaje que tú.
Esta confianza también se gana muchas veces con halagos o con una forma de comunicarse única, que hacen sentir a la víctima especial con el acosador. Cuando esta, por fin, confía en la persona que hay al otro lado, comienzan a ir más allá.
Aquí es cuando suelen pedir que mandes material comprometido como nudes, que le cuentes secretos o que hagas algo por él. Todo lo que puedas enviar a una persona, que realmente no sabes quién es, puede ser utilizado para chantajearte bajo amenaza de exponer públicamente tu intimidad.
Por eso, es importante que nunca des por hecho que una persona desconocida, a la que no has visto nunca, es quien dice ser.
Si has sido víctima de grooming, o crees que podrías serlo, debes contar con el apoyo de tus amistades, familia, profesorado o profesionales. Si tienes problemas puedes confiar en el equipo de Taronja Sencera, estamos aquí para ayudante.