¡Alerta Taronja!
¿En tu relación se dan alguna de estas situaciones?
- Te dice que siempre haces cosas para darle celos.
- Da golpes o patadas a la pared, muebles u objetos cuando se enfada.
- Destruye algún objeto de alguna amistad o familiar que es importante para ti.
- Te empuja.
- Te culpa de que siempre haya peleas y tensiones.
- Se enfada de forma desproporcionada por pequeños detalles.
- Evitas sea como sea que se enfade.
- No le va bien que quedes con tus amistades.
- Se pelea con alguna amistad por celos.
- Te obliga a mantener relaciones sexuales que no quieres o cuando no quieres.
- Te amenaza con hacerte daño.
No sufras en soledad, ven y te asesoramos
¿Y si soy yo quien sin ser consciente estoy ejerciendo violencia en mi pareja?
Si te identificas con esto, contáctanos.
- Te parece que se arregla para provocar que otros/as le miren.
- Crees que te engaña a todas horas y por eso haces que esté contigo siempre.
- Sientes que no puedes vivir sin esa persona.
- Sientes que si te dejara no podrías controlar tus acciones.
- Montas una bronca cuando no te coge el teléfono.
- Te altera no saber con quién está y qué hace.
- Quieres controlar si habla con alguien.
- Si quiere dejar la relación, le amenazas para que no lo haga.
- Tienes ganas de gritarle para que entienda mejor cómo te hace sentir.
- Crees que todo iría mejor si hiciera lo que tú dices.
- Le pegas, aunque después te arrepientas.
- Siempre encuentras un motivo para justificar tus enfados.
- Crees que es la otra persona quien provoca las situaciones de tensión y las peleas.
Aprende a comunicarte con tu pareja

ESCUCHA ATENTAMENTE
Tenemos la costumbre de oír sin prestar atención, mientras pensamos que vamos a responder. Pero la escucha implica estar pendiente de quien te habla con todos los sentidos, mirando sus gestos, advirtiendo cómo se siente mientras dice, en definitiva escuchar atentamente, para entender el mensaje y cuando termine preguntarle cosas que no hemos entendido.
ESCUCHA SIN JUZGAR
Puedes repetir lo que te ha dicho, para validar que has entendido su mensaje y sus emociones. Y deja claro que entiendes y respetas sus opiniones, aunque no coincidan con las tuyas.
RELÁJATE MIENTRAS ESCUCHAS
En ocasiones, ante un problema o discusión, tendemos a tensarnos de forma que nuestra comunicación no verbal se muestra agresiva. Para conseguir una escucha activa, prueba a respirar profundamente e intenta relajar tus músculos, tensando y destensando rápidamente brazos y piernas. Mantén una postura de apertura, sin cruzar brazos ni piernas, para comunicar al otro que estás atenta/o a lo que dice.
PONTE EN SU LUGAR
Imagina que lo que te está contando tu pareja, te pasa a ti, esto es empatía, una de las habilidades mas importantes en las relaciones. Has de entender su punto de vista.


AFRONTA EL PROBLEMA DE MANERA RESPECTUOSA
Si hay un conflicto, no huyas del tema, pues solo se creará resentimiento. Mantén una conversación calmada sobre ello. Controla tus emociones, habla con respeto, para no hacer sentir amenazada a tu pareja.
TU MENSAJE
La forma en que utilices tus palabras será crucial para resolver o agravar el conflicto. Intenta no acusar, sino contar cómo te sientes cuando tu pareja dice o hace determinada cosa. Habla despacio y utiliza ejemplos para que se entienda mejor tu mensaje.
TU ACTITUD
En todo momento muestra respeto por tu pareja, llámale por su nombre y habla despacio. Ten contacto visual como señal de sinceridad. Puedes tener un gesto de cariño para que la otra persona sepa que quieres comunicarte de forma positiva.