Diversos estudios, entre ellos el del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD) revelan que aumenta la polarización de chicos y chicas frente a la igualdad, la violencia de género y las relaciones afectuosas. El barómetro ‘Juventud y Género. Identidades, representaciones y experiencias en una realidad social compleja’, explica que en los últimos cuatro años se han producido avances y retrocesos a partes iguales.
Es decir, uno de cada cinco adolescentes y jóvenes varones de 15 a 29 años cree que la violencia de género no existe y que es solo un “invento ideológico”. Un reflejo de los discursos negacionistas de partidos ultras, que hacen que sitúen la violencia contra las mujeres como algo ‘poco importante’ o ‘inevitable’.
Un 72,9% de las jóvenes considera que las desigualdades de género en España son grandes o muy grandes, mientras que, entre los hombres, estos porcentajes se reducen al 42,6%. Un dato preocupante es que uno de cada diez considera que no existen desigualdades de género de ninguna manera.
Desde 2017 a 2021, la percepción de desigualdad se ha incrementado entre las mujeres (entre seis y siete puntos) pero se ha reducido entre los hombres (de dos a cuatro puntos).
Las formas de violencia en la pareja sufridas más habituales entre las mujeres son revisar el móvil (21,8%), forzar una relación sexual no deseada (20,5%), controlar toda la actividad (18,2%), controlar con quién puede salir o hablar y dónde (17,2%) e insultar y humillar (16,7%). En el caso de los hombres, únicamente revisar el móvil (15,4%), controlar toda la actividad (11,5%) y tratar de que no vea a sus amistades (10,5%) se sitúan por encima del 10% de casos.
En cuanto a las situaciones de violencia ejercidas, algo más de la mitad de mujeres (53,9%) y hombres (50,8%) declara no haber ejercido ninguna. La única situación habitual es revisar el móvil de la pareja, que es mencionada por el 23,6% de las mujeres y por el 10% de los hombres.
Como muchos estudios apuntan, en las primeras relaciones, resulta difícil ver las señales que están latentes en las relaciones tóxicas, y es difícil pedir ayuda sobre ello.
Por eso, desde Taronja Sencera, podemos ayudarte si en tu entorno o relación hay banderas naranja, es decir, cuando esa relación es fuente de sufrimiento y no vemos la salida.