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Nos acercamos a unas fechas que se consideran siempre delicadas para el bolsillo de los consumidores. Es razonable que las fiestas navideñas generen un esfuerzo económico para las familias ya que son días en los que tradicionalmente se suceden muchas reuniones familiares y de amigos. Surge el deseo de complacer y regalar, en especial a los niños. Por este motivo estos días plantean un reto para cualquier consumidor responsable.

“El objetivo final es conseguir pasar unas fiestas placenteras y que los gastos extraordinarios no repercutan excesivamente en el bolsillo, sino que realicemos nuestras compras de forma responsable y con la mayor información posible” ha subrayado la concejal delegada de Consumo, Lourdes Bernal, “por otra parte, en estos momentos de crisis en que se nota una contención del consumo, nos vamos a encontrar con multitud de ofertas que aparecerán en todos los medios publicitarios para atraer al consumidor a los establecimientos comerciales”.

Como ha recalcado Lourdes Bernal, “los consumidores necesitan una información clara y veraz sobre los bienes y servicios ofrecidos en el mercado, que les permita tomar sus decisiones con seguridad. Necesitan también conocer sus derechos, la forma de ejercerlos y los servicios de que disponen para acudir en busca de orientación”.

Para ello es conveniente tener en cuenta algunos consejos, de los que informa la Concejalía:

1.- Es muy importante planificar los gastos navideños. Saber de antemano cuales van a ser nuestras necesidades y hacer una programación adecuada a nuestro presupuesto, tanto de las compras como de la obtención de la información necesaria para poder elegir la opción más interesante. Ello supone no dejar todas las compras para el último día y buscar los momentos más adecuados para poder disponer de tiempo y comprar reflexivamente.

2.- Comparar precios en varios establecimientos y asegurarse de las condiciones de compra. Respecto a estas últimas, hay que informarse claramente sobre los cambios y devoluciones: unos establecimientos los permiten y otros no. Esta circunstancia debe estar debidamente anunciada en su publicidad, tanto mediante carteles colocados en los comercios como en los tiques de compra, especialmente en estos últimos, porque el consumidor no puede demostrar la existencia de esos carteles informativos en el momento de la compra en los casos en que el comercio pone condiciones para los cambios.

3.- Pedir y guardar todos los justificantes de compra. Son imprescindibles en el caso de que aparezcan defectos o faltas de conformidad con posterioridad a la compra, para ejercer nuestro derecho a la garantía. El tique es la prueba de compra, y en él debe constar la identificación del producto, el nombre, domicilio y CIF del vendedor, la fecha, el precio y el IVA aplicado o la expresión IVA incluido.

4.-.El justificante de la compra sirve como garantía. Hay que saber que legalmente todos los productos tienen dos años de garantía, lo que otorga al consumidor los derechos de reparación, cambio o devolución de lo pagado en caso de que aparezca una falta de conformidad de origen.

5.- Cuidado con los menús navideños. No siempre lo más caro es lo más aconsejable ni desde el punto de vista dietético ni del gastronómico. Estas fechas son adecuadas para cocinar en grupo y disfrutar de la cocina, por lo que se pueden elegir menús con ingredientes económicos y elaboración imaginativa para obtener unos resultados iguales o mejores que acudiendo a productos selectos de precios muy elevados.

6.- Es mejor comprar alimentos envasados o congelados con toda la garantía sanitaria que perseguir el producto fresco. Además ello nos permitirá disponer de tiempo suficiente para organizar las comidas sin prisas. Y se debe comprobar el marcado de fechas de caducidad o consumo preferente.

7.- Cuidado con la publicidad. En fechas navideñas el bombardeo publicitario puede confundir o desviar la atención de los consumidores por caminos que no eran los que se pretendían. Hay que dar preferencia a la publicidad informativa e ignorar aquellos mensajes publicitarios con eslóganes llamativos e impactantes que buscan el impulso inmediato y causan confusión.

8.- Para evitar las compras compulsivas hay que pensar siempre en el destino que se va a dar a lo comprado y en si verdaderamente se necesita. Una satisfacción inmediata puede dar lugar a una incomodidad permanente, sobre todo para el bolsillo.

9.- Un consejo a la hora de regalar: a veces es mejor no causar sorpresas y consultar las preferencias del destinatario del regalo.

10.- El derecho a la información del consumidor es fundamental. Por ello debemos elegir siempre los comercios que anuncian sus precios de forma clara y visible, sin inducir a confusión.

11.- Los establecimientos que aceptan tarjetas de crédito no pueden poner ninguna limitación a su uso en periodos de ofertas y rebajas.

12.- Muchos establecimientos están adheridos al Sistema Arbitral de Consumo. Comprar en ellos supone una garantía en el caso de que surja un problema posteriormente, ya que siempre podremos acudir a la Junta Arbitral y obtener un laudo imparcial y equitativo.