València en la memoria - València
València en la memoria

València en la memoria recupera para el espacio público de nuestra ciudad,edificios o monumentos que tuvieron un importante papel (político, cultural, cotidiano) durante la guerra civil, prestando especial atención al año en que València fue capital de la República.
Una serie de elementos nos dan las informaciones más destacadas, ilustradas con imágenes históricas, y ampliables en esta página web, de fácil acceso gracias a códigos QR.
Haciendo 'visibles' de nuevo estos edificios, se recupera para la ciudadanía una parte de nuestro patrimonio durante aquellos años tan importantes como difíciles, complementando así las informaciones ya disponibles para otros períodos de la historia de nuestra ciudad.
- 1. Edificio del Ayuntamiento
- 1B. La Lonja
- 2. Torres de Serranos
- 3. Refugio calle de Dalt
- 4. Palacio del Marqués de Campo (o de los Condes de Berbedel)
- 5. Entorno Palau de la Generalitat
- 6. Palau dels Borja
- 7. San Pío V - Trinidad
- 8. Edificio del Monte de Piedad
- 9. Refugio calle Espasa
- 10. Plaza de Tetuán
- 11. Calle de la Pau
- 12 Estación del Norte
- 13. Colegio de los Jesuitas
- 14. Prisión Modelo
- 15. Hospital de Sangre de Natzaret
- 16. Hospital San Juan de Dios

Entorno del Palau de la Generalitat

Durante la guerra civil española (1936-1939), al lado de esta plaza, entonces de Vinatea (bautizada en recuerdo de Francesc de Vinatea, jurado de la ciudad en el siglo XIV), la Torre del Micalet acogía el centro neurálgico de la Defensa Especial contra Aeronaves. La DECA coordinaba el sistema de defensa pasiva y avisaba de la llegada de bombarderos, normalmente pertenecientes a la Aviazione Legionaria. Basados en Mallorca, su llegada por mar hacía imposible detectarlos con suficiente antelación, pese al uso de fonoreceptores para oír antes el ruido de sus motores.

Los puntos avanzados de observación repartidos entre la costa y Ciutat Vella tenían, pues, un tiempo mínimo de respuesta para avisar al centro de observación del Micalet, que ordenaba entonces que las sirenas sonaran y las baterías antiaéreas abrieran fuego. Se trataba de un sistema insuficiente y obsoleto para hacer frente a la moderna guerra aérea. De hecho, no tenemos constancia de que ningún avión atacante fuera derribado sobre València y la principal tarea de la Junta de Defensa Pasiva (creada en abril de 1937) en caso de ataque era reducir al máximo la pérdida de vidas entre la población civil.
Al oír las sirenas (de entre tres y cinco minutos de duración), la gente corría a los refugios, como el construido en el antiguo emplazamiento de la Batlia (o Casa de la Ciudad) en 1938, si bien desconocemos su tamaño y capacidad. Pasada la amenaza, las sirenas volvían a sonar dos minutos para avisar a la población de que podían volver a la calle. Hoy en día, sólo se conserva una de las veinticinco sirenas de la ciudad, en la calle Martínez Aloy.


El Palau de la Generalitat es desde el regreso de la democracia la sede de la Presidència del Consell, el Gobierno valenciano. Construido en buena parte en el siglo XV y declarado Bien de Interés Cultural (BIC) ya en 1931, el edificio acogió durante los meses posteriores al golpe de Estado de 1936 al Comité Ejecutivo Popular (CEP), verdadero poder alternativo y único organismo político de gobierno para la retaguardia valenciana. Contaba con representantes de todas las fuerzas políticas y sindicales que apoyaban la causa de la República: dos representantes de la UGT y dos de la CNT, uno de la FAI y uno por cada.