La situación mundial del siglo XXI comporta responsabilidades para los municipios. Hay que responder a las consecuencias locales que tienen sus causas en las desigualdades mundiales: pobreza, discriminación y exclusión, conflictos armados, condiciones laborables injustas, explotación de recursos naturales...
Por ello, en mayo 2015, se constituye una concejalía con competencias propias que pueda impulsar acciones locales más justas que repercutan en un mundo mejor.