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Más de 1.800 personas y 33 entidades de la ciudad han expresado sus deseos y propuestas de cara a la peatonalización definitiva de la plaza de l’Ajuntament. Esas opiniones, propuestas y deseos, fruto del proceso participativo impulsado desde el Ayuntamiento, han quedado recogidas en el documento de conclusiones que esta mañana han presentado la vicealcaldesa y concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, y la concejala de Participación y Acción Vecinal, Elisa Valía. Estas conclusiones recopilan una serie de criterios principales y criterios complementarios que son el punto de partida para los equipos profesionales que opten a la licitación para diseñar esta histórica transformación en el corazón de la ciudad.

La concejala de Participación y Acción Vecinal, e Elisa Valía, ha desgranado los 26 criterios, entre principales y complementarios, recogidos en el documento de conclusiones, y se ha referido a los retos fundamentales «que se vislumbran desde los inicios del proceso participativo». Entre ellos está el de «la naturalización del entorno histórico, haciendo una plaza más verde sin perder la imagen que ahora tiene y poniendo en valor su arquitectura». Otro de esos retos es el de conseguir «una plaza equipada de forma flexible en la que se compaginen actividades de distinta envergadura».

También ha destacado el reto de que la plaza de l’Ajuntament se convierta en «un espacio accesible a dos velocidades, a dos modos de llegar a la plaza: uno peatonal y otro que tenga en cuenta que es un nexo de conexión de la ciudad». Igualmente ha resaltado que ha de ser «una oportunidad global y local, un espacio de referencia para toda la ciudadanía y los barrios cercanos, y al mismo tiempo no perder ese potencial de dejarla abierta para la gente que nos visita y para el carácter internacional de la ciudad». Por último –ha señalado- «un reto fundamental que deberán abordar los equipos que redacten los proyectos es cómo garantizar la organización de actividades que atraigan a población muy diversa sin restringir la actividad cotidiana y diaria de la propia plaza».

Elisa Valía ha recordado que el proceso de participación arrancó en septiembre, tuvo su fase de diagnóstico entre octubre y noviembre, hasta alcanzar en diciembre la fase de propuestas, «siempre desde el criterio fundamental de que la plaza es de todos y el objetivo de involucrar a personas de todos los barrios». Valía ha calificado de «éxito absoluto» la participación de 1.800 personas y 33 entidades ciudadanas de todo tipo, así como la presentación de 1.100 cuestionarios vía digital. Se ha referido igualmente a la diferencia entre criterios principales y criterios complementarios de cara al concurso de ideas en el que se seleccionarán 5 proyectos finalistas que serán expuestos durante 35 días, antes de elegir el que se llevará a cabo.

Tras recordar que ayer mismo se presentó el proyecto «València ciudad de plazas», que en opinión de la vicealcaldesa implica «la transformación urbana más importante de nuestra generación», Sandra Gómez se ha referido a las grandes conclusiones del proceso de participación, «la primera de las cuales es que la peatonalización de la plaza ha recibido un apoyo unánime por parte de las personas que han participado: quieren que sea peatonal y que se gane la mayor cantidad de espacio público posible para la ciudadanía, y además que sea más verde y se dedique más superficie para arbolado, zonas de sombra y de descanso». Igualmente ha destacado la voluntad ciudadana de que «la plaza de l’Ajuntament potencie y ponga en valor la identidad y la singularidad valencianas, y la singularidad arquitectónica de la misma plaza. La ciudadanía quiere que sea el gran espacio compartido de la ciudad».

CRITERIOS FUNDAMENTALES

Tanto los criterios principales como lo complementarios se han dividido en tres bloques: Espacio, Red y Actividad. En el primer apartado, Red, los principales son crear espacios acogedores con múltiples zonas para sentarse, charlar y encontrarse; aumentar el verde en la plaza con arbustos, árboles de hoja caduca y más permeabilidad del suelo, y armonizarlo con el conjunto arquitectónico y patrimonial; disminuir la presencia de elementos que empobrecen el paisaje: coches, motos, autobuses, publicidad, señales, rótulos de baja calidad, etc.; mejorar la temperatura en las zonas de estancia con más sombras en verano, y sol en invierno; diseñar mobiliario accesible para todas las personas mediante bancos no muy bajos, con respaldo y apoyos laterales, y suelo adaptado con abotonado para ciegos y enfatizar la imagen arquitectónica de las fachadas de la plaza: Ayuntamiento, Correos, Rialto, Ateneo, etc.

En el bloque de Red se incluyen los objetivos de asegurar recorridos a pie accesibles y amplios que faciliten cruzar la plaza de unas calles a otras, con un material de suelo no resbaladizo y a cota 0; restringir la circulación de bicis y patinetes por zona peatonal, al menos en horarios concretos, y dirigirlos por las calles 30 o carriles paralelos a los viarios; aumentar la frecuencia y horarios del transporte público urbano y metropolitano a la plaza, así como dar acceso hasta la propia plaza en autobús urbano a personas mayores y con movilidad reducida; asegurar acceso con vehículo privado a residentes y parkings de acceso público mediante permisos de acceso claros y con previsión, o con cámaras para control automático, y definir y señalizar claramente los espacios y los horarios de carga y descarga.

CONSERVAR LA FUENTE

En el apartado de Actividad: impulsar medidas para reducir el impacto negativo de algunos comercios y recuperar el comercio local; equipar el espacio con baños públicos y fuentes de beber; diseñar una infraestructura flexible para la programación de actividades culturales (música, baile, teatro) sin que sea un obstáculo o elemento invasivo; no ampliar el número de terrazas tras la peatonalización ya que invaden el espacio peatonal, y verificar que se cumpla, delimitando con marcas en el suelo o pavimento específico, sombrillas fijas, etc.; evitar las condiciones en el diseño de la plaza que favorezcan el turismo de masas (espacio escenográfico, aumento terrazas, grandes grupos...) y programar las actividades de la plaza según unos objetivos claros a definir colectivamente, y comunicar el programa anual o semestralmente.

Entre los criterios complementarios, en el apartado de Actividad, se recogen los de mostrar la evolución histórica de la plaza marcando las trazas del pasado: Convent de Sant Francesc, Barrio de Pescadores, etc., y la posible recuperación de elementos arqueológicos; mantener los puestos de flores en la plaza, reubicados y renovados los quioscos para que se vean más sus escaparates; conservar la fuente circular por su valor identitario y climático, pudiendo asumir mejoras en su diseño para resaltar sus valores.

Los criterios complementarios en red son posibilitar llegar a la plaza en bicicleta conectándola a la red ciclista de la ciudad y evitar que las motos aparquen en zonas peatonales, para ello habilitar espacio para motos en parkings disuasorios cercanos o, si fuera necesario, en calles adyacentes, y si es necesario, sancionar a quien incumpla. Los de actividad, por su parte, incluyen diseñar soluciones innovadoras y adaptables para hacer habitable la explanada central y el resto de espacio condicionado por las Fallas; definir un plan de usos zonal para las actividades, teniendo en cuenta las molestias a residentes (ruido, horarios, accesos) y facilitando la organización de eventos mediante puntos de agua potable, saneamiento y conexiones eléctricas; introducir espacios infantiles evitando elementos estandarizados que no acompañen a un diseño unitario y unificar la estética de mobiliario de terrazas para la plaza.