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La Empresa Municipal de Transportes (EMT) de València congelará, por quinto año consecutivo, las tarifas de todos sus títulos en 2022. Así se contempla en los presupuestos del próximo ejercicio, en los cuales la empresa municipal prevé consolidar su recuperación después de la pandemia, con una previsión de ingresos por actividad de 41,7 millones de euros, un 34% más que en 2021.

La entidad tiene previsto aumentar la plantilla en 2022 para dar respuesta a las necesidades de la empresa y ofrecer a la ciudadanía un servicio de calidad y con mejores frecuencias. De hecho, este refuerzo de la plantilla para mejorar el servicio se iniciará ya en el mes de noviembre con la incorporación de unos veinte conductores y conductoras. La contratación de nuevo personal, junto con la subida salarial del 2% prevista en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del próximo año, hará que la inversión en personal crezca un 5%. Este incremento también incluye la recuperación salarial de la plantilla después de los recortes de 2012 y la aplicación de las medidas del convenio colectivo.

Las previsiones de recuperación de la demanda durante el año próximo impulsarán la cifra de negocio hasta los 41,7 millones de euros. La buena gestión realizada por la empresa municipal también permitirá incrementar en 2022 los ingresos del aparcamiento Centro Histórico-Mercado Central, que ha permitido mejorar la movilidad en el centro histórico y dinamizar el comercio de proximidad.

El Consejo de Administración de EMT tiene previsto aprobar el próximo miércoles 3 de noviembre estos presupuestos, para los que la aportación municipal será de 74 millones de euros, incluyendo los 13,6 millones de los PGE que la Autoridad de Transporte Metropolitano de València tendrá que transferir a la empresa municipal.

El presidente de la EMT, Giuseppe Grezzi, ha destacado que “estos presupuestos pretenden consolidar la recuperación de la demanda iniciada este año con la firme apuesta por el transporte público del Gobierno municipal, dejando atrás los 54 y 55 millones de euros que se aportaban en los años 2012-2015”. “Dentro de nuestro compromiso de ofrecer a la ciudadanía un servicio público de calidad, mantendremos las tarifas para apoyar a las personas que continúan sufriendo el impacto de la pandemia”, ha añadido Grezzi.

Pla de inversiones

La empresa municipal tiene previsto continuar avanzando en su plan de transformación del transporte urbano para hacerlo más sostenible y eficiente con inversiones por valor de 50 millones de euros, que incluyen los proyectos que serán financiados por los fondos europeos Next Generation.

Entre estos proyectos figura la adquisición de una veintena de autobuses eléctricos y la electrificación de la cochera que permitirá incorporar vehículos de cero emisiones a la flota para reducir la contaminación y avanzar hacia el objetivo de descarbonización de la ciudad. También la renovación de la infraestructura de ticketing a bordo de los autobuses para digitalizar la experiencia de las personas usuarias y aumentar la accesibilidad con la introducción de nuevos métodos de pago.

El Consejo de Administración también tiene previsto abordar la regularización de la situación tributaria por un importe de 10,5 millones, que se debe a una disparidad de criterios a la hora de contabilizar las aportaciones realizadas a la empresa municipal por parte del Ayuntamiento de València, siguiendo el criterio de los asesores y del servicio económico municipal.

“Confiamos en que el Ayuntamiento no tenga que realizar esta aportación extraordinaria que reclama Hacienda. Hemos recurrido, siguiendo el criterio de Intervención, que defiende que estas aportaciones quedan exentas de IVA porque no son subvenciones vinculadas al precio”, ha explicado Grezzi, que ha recordado que la interpretación que realiza la Agencia Tributaria en el caso de EMT “se contradice con la realizada a otros operadores de transporte”.

Aunque las aportaciones municipales siempre se han contabilizado sin IVA, Hacienda solo ha revisado en 2016 y 2017 porque el periodo anterior ha prescrito. De hecho, en 2017 el Gobierno cambió la normativa para eliminar esta discrepancia y, desde entonces, las aportaciones realizadas por el Ayuntamiento a la EMT están no sujetas a IVA.